El portavoz de la conferencia episcopal Juan Antonio Martinez Camino hacía público, hace poco tiempo, que los políticos que dieran el si a la nueva ley del aborto se convertirían en "pecadores públicos" y por lo tanto no podrían comulgar y hasta podían ser considerados herejes y ser excomulgados.
El problema para este criaturo le vino cuando en una rueda de prensa le preguntaron, que dado que el Rey tiene que firmar la ley para que esta entre en vigor, si a Su Majestad le sería negada la comunión y podría llegar a ser excomulgado. Hay que ver la prensa canallesca las preguntas que hace. Ahí la cintura que normalmente suelen tener los representantes de la iglesia, le flaqueó en un principio, y aunque por un momento pareció que lo habían "cogido en bragas" se rehizo rápidamente y argumentó, que hombre que el Rey como máxima figura del estado se veía obligado a estampar su firma el documento y por eso con él no iba lo que había dicho anteriormente. Faltaría mas, que los "curas" habrán sido toda su vida lo que quieras, cualquier cosa, menos tontos.
Sr. portavoz de la Conferencia Episcopal si el Rey firma la ley del aborto, tendría que sufrir el mismo castigo que los políticos, en mi opinión ninguno y es una postura clara y ecuánime, lo que no puede ser es que ustedes como siempre hagan distinciones, ya sean de clase, económicas o las que les salgan de sus faldas. Que recuerde el Sr. Martinez Camino el ejemplo del almeriense Nicolás Salmerón, presidente de la Primera República, que dimitió de su cargo por no firmar unas sentencias a muerte, su conciencia no se lo permitía.
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