MOVIMIENTO 15M Y DEMOCRACIA

Les ha costado, ha tenido que haber por medio la estimulación (pinchazos en el culo, mas bien) de muchos intelectuales en los medios de comunicación, casi el ponerlos a parir, pero al final, una parte pequeñísima de la juventud ha reaccionado.
Se habla de no se cuantos miles, no muchos, si los comparamos con los que acuden a un macrobotellón cuando son citados por las mismas redes sociales pero en fin por algo se empieza.
Parece que todo lo dicho y escrito acerca de la apatía que demuestra la juventud actual les ha picado un poco el orgullo y les ha lanzado a la lucha. Esperemos que su ímpetu no se esfume con los primeros reveses, con las primeras cargas policiales, o con los primeros guiños y promesas del poder.
Si quieren y persisten en el empeño, tienen la fuerza para poder darle un pequeño vuelco a su mundo, de ellos y solo de ellos depende.
Por lo pronto ya han conseguido acojonar un poquito a la clase política que estaba tan tranquila en su apoltronamiento, sin nadie que les molestara, con sus amagos de peleas para poder justificar sus sueldos y sus chanchullos, comunes a todos los partidos que tienen el poder de hacerlos y de la noche a la mañana se encuentran con un problema para los que no estaban preparados. La primera reacción, la de siempre, ejercer la fuerza y antidisturbios, pero claro estamos a siete días de unas elecciones y les avisan, cuidadin con lo que haceis, y acto seguido pasan al plan B, que no es otro que dejarlos hacer con la idea de que no aguantarán mucho y pretender engatuzarlos para llevárselos a su huerto y en esas estamos.
¿Qué pasará con lo que ya se ha denominado Movimiento 15M? pues quien sabe, depende de tantas circunstancias, y la primera es la voluntad y el aguante que estos jóvenes estén dispuestos a poner en el empeño, si estos primeros se mantienen firmes, de seguro que le irán uniendo mucha mas gente y si llegan a ser conscientes del poder que tienen y no se dejan engatuzar, conseguirán arrancar al menos un 80 o 90 por ciento de lo que se propongan, pero que no se engañen, les va a costar sangre, sudor y lágrimas, nadie y menos el poder regala nada gratuitamente.
Si están dispuestos a pagar ese peaje y tienen el valor de enfrentarse cara a cara con la maquinaria del poder, que no les quepa la menos duda de que conseguirán limpiar de inútiles, de aprovechados y de sinvergüenzas las filas políticas y con ello un porvenir para ellos mucho mas halagüeño.
Y como nos decían en el ejército, si así lo hicieren la sociedad se lo premie y si no lo hicieren que se lo demande.