CENTRO DE INFORMACIÓN A LA MUJER

Esta dependencia es de por sí una contradicción en si misma y un "atentado" a la Constitución. En ella hay distintos departamentos que constan de juristas, psicólogo, y orientador laboral, desde los cuales se asesora jurídicamente, psicológicamente y laboralmente, de forma gratuita, a personas con problemas de separación o malos tratos.
Esta dependencia está directamente relacionada con la Concejalía de Igualdad, donde está el contrasentido y al "atentado" a la Constitución pues precisamente que de igualdad nada, practican una discriminación por razón de sexo, amparada en un invento que sí es políticamente correcto que han dado en llamar discriminación positiva. Una discriminación ya sea positiva o negativa, no deja de ser una discriminación y por lo tanto siempre hay alguien discriminado.
Lo absurdo del asunto es que todos los beneficiarios de las distintas discriminaciones positivas que se han inventado, ellos personalmente nunca han sufrido la discriminación que se trata de remediar. Cuando se le da prioridad a alguien por ser mujer, no se remedian las discriminaciones que todas las mujeres han sufrido en la historia, las que de verdad fueron discriminadas nunca van a recibir los beneficios de esa discriminación positiva y queriendo hacer herederas de esta discriminación a una mujer actual, solo se está consiguiendo dejar un montón de perjudicados que tampoco fueron beneficiarios de anteriores discriminaciones y dentro de unos años tendremos el mismo problema que hoy pero al contrario.
Si hay que poner un asesoramiento jurídico o psicológico que paguemos todos los contribuyentes sin distinción de sexo, también tiene que poder ser utilizado por toda persona que lo necesite sin distinción de sexo. Se imaginan una situación al contrario, ¿ que no se oiría? y con toda razón.
Yo soy partidario de una total igualdad en todos los aspectos y para que eso sea posible hay que hacer borrón y cuenta nueva y no crear nuevas discriminaciones, por mucho que estas se quieran disfrazar o almibarar, nunca dejarán de ser discriminaciones.
Ah y por supuesto estas discriminaciones no se van a arreglar haciendo cursos de cocina y planchado para hombres, porque si lo que quieren es que compartan las tareas también tendrían que darles estos cursos a muchas mujeres que con mas de treinta años todavía les tiene que poner la ropa en el cuarto de baño su madre, que su madre también es mujer y ella seguro que sí sufrió y sigue sufriendo la discriminación, hasta la de su hija.