domingo, 28 de febrero de 2010

30 AÑOS DE VEINTIOCHOS DE FEBREROS

Han pasado treinta años desde aquel histórico e ilusionante 28 de febrero de 1980. Los que vivimos actívamente aquella jornada de referendum y las previas, todavía tenemos en nuestras retinas y nuestros oidos, los sonidos y las imágenes de la lucha de parte del pueblo andaluz. No hay que olvidar que una gran parte de la derecha nos decía aquello de "andaluz este no es tu referendum" y pedía el voto en blanco o el no, incluso hubo espabilaos que propugnaron la abstención, con la idea de apuntarse hasta la normal en todas las elecciones. También resuenan en nuestros oidos los gritos de fustración cuando en medios gubernamentales se decía que en Almería no se había alcanzado el 50 % mas uno, requerido a todas las provincias andaluzas para que ellos consederaran perdido el referendum, la respuesta de la gran mayoría del pueblo fue un unánime y espontáneo grito de "hijoputas de UCD, hijoputas de UCD".
A Andalucía se le había exigido una cosa que parecía imposible un 50 % mas uno, no de los votantes sino del censo. Aún así y como no las tenían todas consigo, utilizaron todos los medios a su alcance para boicotear este referendum y llevarlo a sus tesis. Los censos no se actualizaron, había multitud de muertos incluidos en ellos, dobles censamientos de muchas personas de ahí el grito aquel de "Suarez ¿y tus muertos a quien han votado?", la mayoría de medios de comunicación se alinearon activamente con las tesis gubernamentales y en los recuentos hubo un intento de quitar de enmedio la mayor parte de papeletas del "si" que se pudieran. En definitiva fue un intento en toda regla de pucherazo y que para la UCD trajo consecuencias nefastas, desde ahí ya no levantó cabeza, no ya solo en Andalucía donde un gran número de andaluces de sus filas se opusieron a su postura desde el principio y rompieron con UCD, sino en el resto de España.
Andalucía que es una tierra sabia y agradecida supo por un lado premiar la actitud de esos andaluces que antepusieron sus ideas a los cargos políticos y todavía recuerda muy especialmente a Manuel Clavero Arévalo y a todos los que le siguieron en aquella actitud y también ha sabido castigar a todos los que intentaron con malas artes frenar su deseo de autonomía. Cuando Javier Arenas dice que un partido no se puede perpetuar en el poder, aunque pueda llevar razón, que piense que eso lo tiene que decidir el pueblo y que tal vez este pueblo todavía tenga en la memoria la actitud de los suyos en este día y su no apuesta por el deseo de la mayoría de los andaluces y que tenga claro que si algún día consigue su objetivo, será mas por deméritos de sus adversarios que por méritos propios. Los andaluces somos un pueblo con una cultura milenaria, de las mas antiguas de Occidente, que cuando el resto aún estaban en la prehistoria ya escribían sus leyen en versos y con una gran memoria, por lo tanto no olvida que en los ocho años que su partido estuvo en el gobierno no hizo absolutamente nada por Andalucía, todo lo contrario no le quizo ni reconocer el censo verdadero para que recibiera el dinero que le correspondía según su población y el no tuvo ni la valentía política, ni los cojones que en su momento tuvo Manuel Clavero Arévalo.

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