Independientemente de que todas las generalidades sean injustas, se puede afirmar que vivimos en un país, España, donde triunfa lo casposo y chabacano y lo peor no es eso, lo peor es que somos un país casposo hasta la médula, donde la casposidad, la chabacanería y el mal gusto se está imponiendo en todos los niveles con el beneplácito de una gran mayoría de ciudadanos.
El buque insignia de este fenómeno es la televisión, concretamente las cadenas privadas y muy especialmente Telecinco, aunque ninguna está lo suficientemente libre para poder tirar piedras a las demás. Tanto ha arraigado en esta sociedad este tipo de televisión mal llamado basura (a la basura se le está buscando alguna aplicación práctica con eso del reciclaje, pero de este tipo de televisión no se puede reciclar nada) que lo está invadiendo todo: radio, prensa de la antes llamada seria, revistas, en fin, la casposidad y la chabacanería está inundando todos los medios de comunicación.
¡Que venden¡ por supuesto, ¡que los culpables somos los ciudadanos¡ (que aunque en las encuestas a todos nos gustan los documentales y los programas educativos, las cuotas de pantalla dicen que somos no solo casposos y chabacanos, sino también hipócritas y mentirosos) por supuesto, ¡que no hay forma de ponerle remedio a esto por aquello de la "libertad de expresión"¡, bueno eso es mas que dudoso. Hay programas en horarios de tarde y por tanto en horarios infantiles que podían perfectamente y con las legalidad vigente estar prohibidos y las cadenas que lo emiten denunciadas pero aquí nadie, ni siquiera las autoridades, se salvan de la chabacanería y el mal gusto instalado en este país, por eso se dice que las autoridades de cualquier sitio son el fiel reflejo de sus ciudadanos y que cada país tiene el gobierno que se merece, por supuestísimo y el que quiera vivir entre gente educada, con buen gusto y que huya de la chabacanería, que se busque otro país, que los hay an abundancia, porque aquí eso es lo que hay y por desgracia tenemos casposidad, mal gusto y chabacanería para rato y el colmo de este compendio de "virtudes" lo tenemos en que Belén Estebán y Paquirrín van a aparecer en la nueva película de Torrente. ¿Puede haber algo mas casposo?.
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Y lo que nos queda, piojo, porque haciendo un breve análisis que puede atufar a elitista o "facha", aunque a mí me lo contó alguien tan poco sospechoso de ser de derechas como un ex director del diario "Público", la cosa va a ir a peor, porque se observa una tendencia a que la televisiones públicas las vea la gente con menos cultura y también menos recursos. La gente con más recursos o más criterio se tira a las cadenas de pago, la parabólica y a internet. Es decir, que el público objetivo de las televisiones está cada vez más aculturado y quiere eso, carnaza, así que va a haber muchísima más. No sé si llegará al punto de que Belén Esteban presente el telediario, pero vamos, no me sorprendería de nada. En fin, a ver si encuentro tiempo y escribo algo en mi blog, aunque a mí lo que de verdad me preocupa no es lo que pase en la pequeña pantalla (que no la veo desde hace años) sino lo que está pasando fuera, no sé si la gente es más chabacana por la tele o la tele es más chabacana por la gente, pero desde luego cada día más se ve que se están perdiendo las maneras. Un saludo.
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