AHORA QUE TENEMOS TIEMPO VAMOS A CONTAR ALGUNAS VERDADES

Siempre he mantenido que España es un pais ideal para mangantes: para mangantes políticos (no hace falta comentar nada); para mangantes empresarios, que después de diez o doce años ganando dinero a espuertas, a las primeras dificultades son insolventes totales; para mangantes profesionales "liberales", que usan su trabajo oficial para ganar bajo cuerda tres, cuatro o vete tu a saber las veces su sueldo oficial y por supuesto mangantes trabajadores que han estado y están cobrando el paro y trabajando. Todos, sin excepción, necesitan la connivencia para sus "mangantadas" de funcionarios estatales que hacen la vista gorda y no cumplen con su obligación y que son por lo tanto mangantes funcionarios.
Viene esto a cuento, porque a raiz de la huelga del campo, parece que a todo el mundo le preocupa muchísimo el que los trabajadores agrícolas esten cobrando el paro y con ello se compren coches, electrodomésticos y otros "caprichos" y parece ser que le preocupa mucho a ASAJA que es sinónimo de PP y lo que es peor todavía, a muchos tontos de Palma, que para colmo de su estupidez, son los que les venden o arreglan los coches, los electrodomésticos y los otros "caprichos".
A ASAJA y al PP les diría: a los primeros que miren, por poner un ejemplo, cuantos médicos de grandes hospitales tienen en sus filas, médicos que se han hecho dueños de fincas, para poder blanquear el dinero que ganan en sus consultas privadas, a las que inevitablemente hay que acudir para no tener que esperar un año y si vas a su consulta privada estás admitido en el hospital que trabaja al día siguiente, sin problemas de lista de espera. Que miren, por ejemplo, en los archivos del hospital de Osuna. A los segundos les diría que eso, según ellos antes del 96, pasaba porque le interesaba al PSOE, pero que ellos en los ocho años que estuvieron en el gobierno, no fueron capaces de atajar, como tampoco fueron capaces de acabar con la corrupción que costó el gobierno al PSOE, lejos de ello, en los ocho años de su gobierno, la corrupción aumentó, pero claro esto les importaba mucho menos que cuando estaban en la oposición, porque ahora los corruptos eran de los suyos y el juez Garzón ya no era aquel juez valiente al que ellos jaleaban sino que era un perseguidor y un prevaricador.