Estamos a un par de semanas cortas para la Romería de Palma del Río y por lo tanto va a hacer pronto un año que nuestro 2º teniente de alcalde (Celtibético-Chevi) tuvo la osadía de escribir en su blog una serie de consideraciones sobre el comportamiento de los caballistas en dicha Romería.
El escrito levantó las iras no solo de los caballistas aludidos, sino también la de muchos capillitas que consideran peor que se critique una cosa a que se haga. Pese a que el amigo Celtibético-Chevi intentó matizar y aclarar sus pensamientos puestos a la luz del blog, supongo que en vista del cariz que estaban tomando los acontecimientos y del posible daño que tener en contra a esta gente le podría suponer en las próximas elecciones, los inquisidores no quedaron del todo satisfechos y creo que se la tienen guardada (ellos que tanto predican el perdón y lo de la otra mejilla).
Por lo tanto sugiero, que o bien de motu propio y si no que sus compañeros lo obliguen, que nuestro 2º teniente de alcalde en la próxima Romería y como penitencia para purgar sus "pecados del año pasado" vaya descalzo detrás de todos los caballistas obligándose a pisar todos los cagajones y meados de los caballos/as, así como algún que otro trocito de cristal de algún que otro vaso de cubata que se haya roto y que no ponga como excusa que los dolores del pie, quien sabe si lo mismo que no han podido adivinar ni curar tantos médicos visitados hasta ahora, se le cura milagrosamente ante esta penitencia.
martes, 17 de agosto de 2010
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