lunes, 16 de agosto de 2010

LOS MÓDULOS (LOS DE HACIENDA NO LOS QUE CANTABAN "TODO TIENE SU FIN"

Cuando Hacienda implantó el sistema de módulos hacia finales de los ochenta, según creo recordar, dio un paso mas hacia la impunidad en el fraude fiscal, aparte de quitar del mercado una gran cantidad de trabajo potencial.
Con este sistema, Hacienda se aseguraba unos ingresos mínimos y perfectamente cuantificables, fuera cual fuera la situación económica, o por lo menos eso creía, pero no tuvo en cuenta la picaresca española, tan arraigada en este país desde tiempos inmemoriales y como refiere el dicho quien hizo la ley hizo la trampa.
Hacienda prefería con este sistema recaudar un mínimo y facilitaba a los medianos empresarios la oportunidad de no tener que blanquear dinero, para que se vais a pringar si lo que teneis que blanquear es "un cachillo de ná", a la vez que les daba un instrumeto legal y práctico para poder escaquear otros impuestos.
Con este sistema, muchos "modulistas" adquirieron la sana costumbre de comprar a sus proveedores muchas cosas sin IVA y después facturárselo todo con IVA a sus clientes con la excusa de que tenían que pagar los módulos. Tambien adquirieron otra sana costumbre estos "modulistas" como era hacer facturas falsas a falsos clientes a los que solo les cobraban el IVA, total como para su IRPF no tenía ninguna repercusión, pues era fijo, ¿por qué no hacerlo?. El resultado de todo esto eran como mínimo los siguientes fraudes fiscales: 1º el proveedor al que le compraba sin IVA, al no cobrar este impuesto tampoco lo repercutía a Hacienda, sobretodo si no estaba en los dichosos modulitos y además al no facturar, esto hacía que su cuenta de beneficios no se sobrapasara. 2º al comprar sin IVA y venderlo con IVA, a nuestro modulista, diga lo que diga, le salía rentable este impuesto, pues Hacienda le había calculado la cantidad a pagar en base a una diferencia estimada entre el IVA pagado y el IVA cobrado. 3º este sistema le permitía emitir facturas ficticias a unos "no clientes" que por un cómodo y deducible 16 % antes, 18 % ahora, reducían sensiblemente sus beneficios y escaqueban a Hacienda o bien el 20 o bien el 35 de IRPF o de Impuesto de Sociedades.
Si ya de por sí el fraude fiscal es dificil de coger in fraganti, imagínense si encima ponemos en manos de los defraudadores un arma como esta. ¿Cuantos miles de millones habrán perdido nuestras arcas públicas en estos años?. En estos años pasados de bonanza económica ¿cuantos millones de facturas falsas se habrán hecho? ¿cuantos millones de euros de estas facturas habrán ido a tapar materiales no comprados para realizar obras públicas que a los pocos años había que reconstruir? ¿cuantos años llevan los inspectores de Hacienda cobrando el sueldo por solo rascarse la barriga, bueno el sueldo y lo que cayera, que cuando hay, hay para todos o no?.
Lo curioso del caso es que ahora que pintan bastos es cuando se le ocurre a Hacienda decir que hay que modificar el sistema de módulos y subirlo, con lo que ya están los empresarios poniendo el grito en el cielo (esos que antes se prestaban a los chachullos) diciendo que como se les ocurre hacer eso con lo dificil que está ahora la cosa.

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