La Real Academia de la Historia se ha gastado 6,4 millones de euros en hacer un Diccionario Bibliográfico Español, los mismos 6,4 millones de euros que desde 1999 hasta ahora, les ha ido destinando el Ministerio de Cultura del dinero de todos los españoles.
Durante este invento, tanto el gobierno de España como los titulares de Cultura han cambiado de signo político y de personas. Comenzó el mismo el 21 de Julio de 1999, siendo Ministro de Cultura Mariano Rajoy, a este le siguieron Pilar del Castillo, Carmen Calvo, Cesar Antonio Molina y Ángeles González Sinde, bajo cuyo ministerio ha salido a la luz.
Como no podía ser de otra forma con el padre que tuvo la criatura y las madres que buscó para hacer el chiquillo, el resultado ha sido un Diccionario Biográfico Español tendencioso, falto de rigor histórico y con un color azulón, tan de moda por cierto estos días, que es tan fiel a sus orígenes como los que han terminado de criarlo lo son a su desidía, que ha permitido a estos pseudohistoriadores sacar adelante este engendro.
Es entendible que el Sr. Rajoy permitiera que el encargo de todos los biografiados afines, recayera, por ejemplo, en historiadores de tan reputada imparcialidad como Luis Suarez Fernández, vinculado a la Fundación Francisco Franco, Presidente de la Hermandad del Valle de los Caidos y miembro del Opus Dei o José Martín Brocos, que refiriéndose al militar golpista Carlos Asensio Cabanillas escribe que llegó a Almendralejo y allí permaneció "normalizando" la vida ciudadana. Se le ha olvidado explicar que esa normalización consistió en el fusilamiento de alrededor de 1000 personas, no sin antes haber sido vejadas, violadas o torturadas, muy especialmente en el caso de las mujeres.
También es entendible que el Sr. Rajoy permitiera que el encargo de todos los biografiados que no le eran afines, recayera en esa misma clase de historiadores y así vemos como el mismo José Martín Brocos define a los guerrilleros antifranquistas como bandoleros y a los militares que siguieron fieles a la República los define como "el enemigo" mientras los alzados son "salvadores o normalizadores de la vida cotidiana".
Lo que no resulta ni medianamente entendible es que los distintos ministros psoeistas que ha habido después, Carmen Calvo, Cesar Antonio Molina y Ángeles González Sinde, se hayan dedicado nada mas que a seguir dando dineros públicos a la Real Caverna de la Historia y a permitir la publicación de los primeros 25 tomos de ese libelo, mal llamado Diccionario Biográfico Español, sin preocuparse lo mas mínimo de la versión que de cada personaje biografiado tuvieran tan "reputados e imparciales" pseudohistoriadores.
Ahora todo queda en escandalizarse y lamentarse, pero de la desidía y dejadez de estos últimos responsables de Cultura nadie dice nada.
No queremos ni pensar que se escribirá en los siguientes 25 tomos por parte de estos pseudohistoriadores de la caverna, presumiblemente con un gobierno del PP, si con un gobierno psoeista han tenido los santos cojones de escribir toda esa sarta de desviaciones y falsedades históricas envueltas todas en esas perfectas pastas color azul, vamos que no se les ha escapado ningún detalle.
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Piojo como tu ya sabes a los sociatas no les gusta entrar en estos temas para no reabrir viejas heridas. Ahora permitirle a los de siempre que te estén volviendo a pinchar en las mismas, eso es otra cosa, aunque sea con dineros de todos que ellos graciosamente le dan.
ResponderEliminarCon gente tan pacata como estos sociatas, así nos luce el pelo a nosotros, mientras que a los de la gomina les brilla mas que nunca y encima con dineros de todos los españoles, hasta del nuestro que es lo que mas jode
desde 2004 IU lleva reivindicando entre otras cosas un monumento a las victimas del franquismo, que aun no se ha hecho, de veras piensas, piojo, que en un gobierno 9-2, iu puede llevar a cabo sus propuestas de memoria historica, ¡VENGA YA!
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